La humanidad lleva luchando miles de años contra la enfermedad. Entonces vino a mi mente la siguiente pregunta. ¿Por qué?.Las artes de la curación organizan estrategias para tratar la ausencia de armonía; y en este sentido el conocimiento del problema es la clave de la solución.
Los profesionales dirigen sus estrategias al síntoma, con una actitud de lucha contra el supuesto estado alterado y esto hasta la fecha no esta dando el resultado apetecido.
Hoy sabemos que es posible ganar sin luchar, y que se consigue el máximo haciendo lo mínimo.
Hoy sabemos que es posible ganar sin luchar, y que se consigue el máximo haciendo lo mínimo.
La clave esta en explorar nuevas posibilidades (alimentación, actitud, terapias holísticas) y evitar en lo posible todo alejamiento de la vida en armonía con la naturaleza.
El TAOISMO nos invita a meditar sobre la carencia última del sentido de la codicia y de la posesividad que subyacen en toda agresión. Los aspirantes budistas acostumbran a visitar las hogueras crematorias y a observar cómo se pudrían los cadáveres de las personas muertas cuyos familiares no habían podido pagar una cremación. Lo hacían para expulsar fuera de sí la codicia y la posesividad. Después de conseguirlo, dirigen sus mentes hacia pensamientos sobre individuos y sociedades ideales.
De igual modo hemos de dirigir nuestros pensamientos en lo referente a la salud, hacía estados ideales de armonía orgánica y de convivencia celular.
Nuestros hábitos han de ser costumbres de liberación y amor. Hoy la salud con sabiduría es posible.
La actitud de comunión con el medio que nos rodea, en el cual convivimos es una necesidad de equilibrio evolutivo.
OM TAT SAT
RAMALA SHIVA
El TAOISMO nos invita a meditar sobre la carencia última del sentido de la codicia y de la posesividad que subyacen en toda agresión. Los aspirantes budistas acostumbran a visitar las hogueras crematorias y a observar cómo se pudrían los cadáveres de las personas muertas cuyos familiares no habían podido pagar una cremación. Lo hacían para expulsar fuera de sí la codicia y la posesividad. Después de conseguirlo, dirigen sus mentes hacia pensamientos sobre individuos y sociedades ideales.
De igual modo hemos de dirigir nuestros pensamientos en lo referente a la salud, hacía estados ideales de armonía orgánica y de convivencia celular.
Nuestros hábitos han de ser costumbres de liberación y amor. Hoy la salud con sabiduría es posible.
La actitud de comunión con el medio que nos rodea, en el cual convivimos es una necesidad de equilibrio evolutivo.
OM TAT SAT
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